domingo, 25 de junio de 2017

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No recuerdo si estaba más nervioso por lo que echaría de menos a Héctor y Belén (Elsa aún no estaba ni en el encargo) o por el reto al que me enfrentaría la primera vez que fui a los Alpes. Salí de la playa dirección Cáceres. Allí había quedado con mi compañero Txolfo, para emprender, quizás, uno de los retos más ambiciosos, y lo que esperaba que entonces, fuera el inicio de otros muchos más proyectos.
Saliendo de Barrerones...rumbo a Alpes 2010
Salíamos hacia Chamonix, con la idea de ascender al Montblanc (4.810m) y habíamos quedado en Cáceres por la tarde, pero recuerdo que algo pasó y hasta el día siguiente no conseguimos salir, o probablemente esa misma madrugada, nunca nos daba pereza viajar de noche y dormir en cualquier sitio. Todo el día de viaje hasta que la madrugada siguiente llegamos a uno de los parkings de Chamonix, que en la actualidad es una pista de atletismo. Recuerdo aquella mañana cuando abrí la puerta del coche tras despertarnos, y mirar hacia arriba, el majestuoso Glaciar Des Bossons, y justo arriba, a lo lejos, el Dome du Gouter y a su izquierda el objetivo. El Montblanc. La estampa es espectacular, y cada vez que he vuelto he parado en el mismo sitio para grabar, cada vez más, esa imagen en mi mente, para que se quede ahí. Que no se borre.
Un par de años después volví con la misma sensación de nervios, pero ahora si que estaba mi pequeña para echarla de menos. Seguro, que los nervios me los provocaba dejar a los tres en casa.

No he parado de plantearme objetivos, pero siempre con el mismo espíritu de montaña. Pero claro, me di cuenta de que ya no disponía de tanto tiempo para hacer estas actividades, y busqué algo que me enganchara. Nunca pensé que correr lo pudiera hacer de la manera como lo hizo.
Y tanto... Me daba cuenta de que podía llegar a muchos más sitios en menos tiempo. Y así, corriendo por la Garganta de los Infiernos en su primera edición, es como encontré la fórmula.

Desde entonces, desde el 2011, no había parado, hasta el 2017, habiendo podido hacer carreras tan espectaculares como el Gran Trail del Aneto, Ultrail La Covatilla, UltraTrail de Gredos, o seis veces el Ultra Trail de Sao Mamede, pero todo ha cambiado.

Trail del Aneto 2012
Ahora que llevo un mes parado, parece que esto se empieza a tornar un poco oscuro, y no soy capaz de visualizar el momento en el que pueda hacer algo. Caminar no está mal, pero ya no llego tan lejos. Eso de llegar a casa y ver el track del recorrido y ver por dónde había corrido y qué sitios nuevos había conocido, ya no está-
Ahora me doy cuenta de lo que me gustaba de correr.
Era llegar lejos.
Conocer más y más.

Y es que ahora necesito mucho más tiempo.

El Viernes, sobre las 23h debía estar en la línea de salida del GTP, carrera en la que hace cinco años tuve que retirarme por lesión. Entonces, casi, sin experiencia. Pero este año tenía la oportunidad. Iba bien preparado, física y mentalmente.



Pero no echo de menos lo más mínimo no estar allí. No voy a negar que me gustaría,  que desearía poder estar en condiciones de estar recorriendo la sierra de Guadarrama. De darle esa vuelta a su sierra, ascenciendo a La Maciliosa, La Morcuera, a Peñalara y finalmente al Puerto de Navacerrada.

Pero no cambio por nada, haber disfrutado de un estupendo momento con buenos amigos esa noche. Poder celebrar dieciséis días después mi "cumple" de esta manera no lo cambio por nada.
De haber disfrutado de Antonio y Macarena, que habéis sido como una extensión de nosotros, cuidando de los niños, de  Belén y de mi mismo cuando lo hemos necesitado con una gigante muestra de cariño.

De manos de un buen montañero
De los "Popis", nuestra familia aquí en  Mérida, no puedo decir mas de vosotros.

"Del Juanfran y La Inés" que nos tranmitís es alegría y gracia, haciendo que echar un rato con vosotros sean momentos en los que te olvidas de todo lo negativo y reímos y reímos.

De Susana y Marce, fuerza, sólo fuerza, fuerza y fuerza. Un ejemplo y una ayuda que valen un tesoro, os admiro, me ayudáis a hacerme ver que hay que seguir.

De Miguel y María... no se qué decir de vosotros... cariño, calma, apoyo... aparecer en nuestro camino, en nuestras vidas, tiene un precio incalculable.
Ya tengo tarea para mi reposo...
 
De Marian y  Alfonso, aunque no pudiérais venir, estuvísteis presentes, así que nos debemos una... de coquinas.
A todos y a los críos de todos, muchas gracias. no tuve palabras en su momento, por la emoción, y aún estoy sin ellas, porque hay cosas que no se pueden expresar ni si quiera con palabras.

Para Belén tampoco tengo palabras, no me omaginaba nada de lo que iba a suceder, siempre ahí... ni para Héctor  y elsa, imagino el tremendo esfuerzo que habies realizado como cómplices sin "soltar prenda"...


El mejor regalo es teneros ahí. ¿Acaso hay alguno mejor?

"El dar engendra el recibir y el recibir engendra el dar. "Dar y Recibir" son dos aspectos del fluir de la energía del Universo. Esto es tan simple como la idea de que debo dar lo que quiero recibir. Si deseamos alegría, démosles alegría a otros; si deseamos amor, aprendamos a dar amor; si deseamos atención y aprecio, aprendamos a prestar atención y a apreciar a los demás; si deseamos riqueza, ayudemos a otros a conseguir esa riqueza, si deseamos placer, demos placer, en realidad, la manera más fácil de obtener lo que deseamos es ayudar a los demás a conseguir lo que ellos desean."
Deepak Chopra


jueves, 1 de junio de 2017

ARRITMIA.Falta de regularidad o alteración.

Después de casi dos semanas desde la aparición de la arritmia, espero que mañana todo esto no sea más que una corta pesadilla.
Laguna Gande de Gredos
Semana corta, pese a lo largo que se ha estado haciendo la espera de los últimos siete días, desde que salí del hospital a la espera de una Cardioversión eléctrica. No me quiero no imaginar, lo largo que se le puede hacer a una persona que espera encontrar un donante, por ejemplo, de médula ósea.
Visto así, puedo sentirme algo afortunado.
Al fin y al cabo, mañana a estas horas, habrá pasado todo, o casi todo.
En Cuchillar de Navajas
Tampoco puedo ocultar mis nervios ni el miedo que tengo en estos momentos, pero todo esto se hace más pequeño cuando empiezo a observar lo que tengo a mi alrededor.
Esa compañía de amigos por las mañanas, a las 9, camino a una terraza, a un ritmo estratosféricamente lento, para lo que ellos están acostumbrados, incluso con paradas a descansar cada 400 o 500m. Algunas visitas de las tardes, y sobre todo las de Miguel (mister), tanto en el Hospital como en casa. Estos días se hacen más llevaderos.
O Héctor, con el interés que pone cuando le explico lo que me ha pasado y cómo es el tratamiento al que me someto mañana, que seguro que no lo entiende, pero que me pregunte al acabar "¿Papi, entonces a partir de mañana ya puedes jugar?" y que lleguemos a casa y me prepare un tazón con leche de avena y cereales, de la misma manera y con el mismo ritual que cada mañana, estos días que desayuno con él, hacemos.
O los besos de Elsa, que es un pelín más arisca, por las mañanas cuando la despierto para ir al cole, que en situaciones normales, le cuesta mucho más sencillo girarse hacia el lado contrario para seguir durmiendo.
Pero sobre todo, lo que más motivado me tiene, es el haberme dado cuenta de la cantidad de cosas que me ha enseñado Belén en tantos años. A seguir con ganas, a adaptarse a las circunstancias, a seguir levantando la cabeza, a seguir luchando.
Y eso es lo que me hace mirar las cosas con mayor positivismo y ganas de seguir a su lado toda la vida.
Y es que tengo una familia excepcional.

Hoyamoros
Este finde se celebró la carrera de Zegama, una de esas tantas carreras que todo corredor de montaña desearía realizar al menos una vez en la vida. Y no pierdo la esperanza de poder hacerla algún año. Constantemente en Facebook, aparecen imágenes y vídeos de carreras. Esto podría suponer que me genererara cierta ansiedad por no poder participar en alguna (o ninguna) de ellas. Pero la verdad es que nada de eso me sucede. Ganas, si, seguro que algún día puedo hacer algo.
Pero ahora me replanteo volver años atrás, cuando mi actividad deportiva se basaba únicamente en el monte al más puro estilo, paredes de escaladas, canales, ascensiones, incluso volver a hacer algo de bloque. Pero siempre, ligado a la montaña.
Y si, alguna carrera.
Fantaseo estos días, trotando por montañas imaginarias, con mucho prado (o prau, como decía mi abuela Albita), y bosques, y algunas zonas con mucha roca y piedras y algo de nieve, pero sólo me lo imagino, y lo cierto es que algo bien me hace.
MB 4810m

Ese amor a las carreras largas, sigue ahí. Me ha aportado tanto, que pese a echarlo de menos, seguiré manteniendo un maravilloso recuerdo. De tantas emociones, y sufrimientos, pero más alegrías. Algunos amigos, arrastrados en parte por mi culpa, seguirán participando en ellas, y algo de mi irá recorrerá largas distancias aún. También de aquellos con los que haya compartido entrenos o km (me dará envidia cuando hablen de tiradas largas a las que no pueda asistir, pero será sana).
Barruecos. Sector La Virgen
Es posible, o casi seguro que todo esto venga causado por el gran esfuerzo realziado en los últimos años, o si me apuras en los últimos meses. El cardiólogo lo tenía claro. Con 40 años y haciendo ese esfuerzo, la causa está clara. El sentimiento que tenemos por este deporte no asegura, en nuestro interior, que algo tendrá que ver, pero no toda la causa es esa. Quizás para no castigar a este deporte, echándole las culpas, con tantas cosas que nos haya aportado, quizás por miedo a desligarnos de ello., o quizás porque somos unso zoquetes.
 ¿A caso no se castiga más a un corazón atizándole a 4'/km en una maratón o una media maratón que a 8'/km en una carrera de ultradistancia?
Lo que si es cierto es que las cosas habrá que replantearlas. Seguro que tomarlas con más calma. Y quizás alguno de vosotros debáis replantearlo (yo, casi seguro que no lo haría) y tratar de controlar. No porque sufráis esta misma dolencia, supongo que habrá otras muchas.
Al fin y al cabo, 
Da igual.
Haced lo que queráis.
La vida sigue, falta regularidad, pero sigue.